El Amiir Issa

Posted on 5:03 In: ,

Anoche fuimos con Eduardo a El Amiir Issa, restaurante árabe al que ya habíamos ido, pero en su antiguo local de Av. Perú.

Ahora tienen un gran local cerca de la Plaza San Enrique, precioso..... y la comida muuuuuy rica. Además don Salvador Caraa , el dueño, muy atento y simpático, sugiriendo lo mejor para comer.

Si ya han leido este blog antes, sabrán que soy re mañosa, pero ayer comí super rico. Me encantan las papas rellenas (en este caso las árabes), comí falafel, kubbe, kabab, otra cosa que no me acuerdo como se llama, arroz árabe (por supuesto), Eduardo comió sus hojitas de parra, que le encantan y además éstas estaban particularmente buenas. Ah! y de postre, por supuesto.... dulces árabes, acompañados de café idem.

El pan pita exquisito y el hummus le encantó a Eduardo, que pidió repetición varias veces. Por supuesto lo que sobró (venían muchas unidades de cada cosa y no pudimos más) se lo llevó, incluso el pan pita.

Por supuesto, no le sacamos fotos a los platos, porque a diferencia de mi brother todavía no tengo en la cabeza el chip de sacarle foto a todo para postearlo, así que bajé una foto del restaurant.


Un ejemplo para todos

Posted on 9:53 In: , , ,

Esta es una secre del edificio donde trabajo, que es un ejemplo de fuerza, optimismo y fe. Esta es la transcripción de una entrevista (no me acuerdo en qué revista). Puede ser un poco largo de leer, pero vale la pena. Hace más o menos un mes, ella volvió a trabajar y se ve tan regia como siempre.

Testimonio de Guillermina Vera Espinoza 42 Años.

En el año 2005 me realicé mi primera mamografía, la cual salió absolutamente normal, en el 2006 por diferentes motivos no me realice dicho examen y en Mayo de 2007, después de haber visitado 2 médicos distintos, con diagnósticos equivocados, un tercer médico me diagnosticó “Cáncer de Mama”.

En el momento en que el médico me explicó el tratamiento a seguir, pensé en mi hija y mi familia y en todo lo que se me venía encima, pero igual di gracias a Dios porque tenía la posibilidad de tener un tratamiento y mejorarme.

En ese momento el apoyo de mi hija, mi pareja, mi familia y mis amigos fue fundamental para el tratamiento que se me venía y eso me hizo estar tranquila y resignada hasta que comenzó el tratamiento que, la verdad, es que me hizo sentir muy mal, físicamente, especialmente las 4 primeras quimioterapias.

Estando en mi primera quimioterapia la enfermera de la clínica, me habló de la “Corporación Yo Mujer”, me pareció interesante y además me agradó que fuera todo gratuito.

Pocos días después, estando en casa me decidí a llamar. Tal fue mi sorpresa, el agrado, alegría e interés con el que fue recibido mi llamado, que ese mismo día, 2 horas más tarde, yo estaba en “Yo Mujer”, participando de un taller.

Desde ese día es que “Yo Mujer” ha sido un gran apoyo en mi tratamiento y recuperación, son una red de apoyo extraordinaria, donde todas las personas que trabajan ahí entregan sus conocimientos y ayuda con tanto amor y de forma tan incondicional, que es admirable.

En “Yo Mujer” sentí que hablábamos el mismo idioma y podía expresar lo que me pasaba y siempre había alguien que lo entendiera, tal como yo lo sentía.

Todos los talleres, las sesiones de reiki y flores de bach, sumado a los testimonios y las conversaciones con personas que estaban pasando por lo mismo, me hicieron tener fuerzas para seguir adelante, no desfallecer y tomar esto con esperanza y alegría de vivir. Sí, eso es lo que me entregó “Yo Mujer” alegría de vivir y mucho amor. Y hoy siento la necesidad de transmitírselo a otras mujeres que están tristes por padecer esta enfermedad.

¡¡¡No estén tristes!!! No se pregunten: “¿Por qué a mi?”, pregúntense: “¿Para qué?”

Esta enfermedad era por algo. Me di cuenta que tenía que hacer cambios en mi vida y que Dios me dio la oportunidad de hacer esos cambios y aprendí a quererme y a disfrutar las cosas pequeñas y sencillas de la vida. También, me permitió sentir el inmenso cariño y amor de mi familia y de tantas personas que yo no pensé que estarían conmigo en estos momentos.
Mi cáncer de mama es uno de los más agresivos, es por eso que ya ha pasado un año de tratamiento y todavía tengo que seguir por 6 meses más en tratamiento, pero aquí estoy firme y feliz de estar viva.

Luchen por lo que quieren, luchen por sus sueños………. Luchen por Uds.

Un fuerte abrazoGuillermina Vera E.

Reuniones de colegio

Posted on 5:09 In: , ,

He tenido la suerte de que en los colegios en que ha estado la Antonia, sólo hay 1 máximo 2 reuniones de apoderados al año, lo que es un agraaaado. Bueno, ahora me vacunaron como delegada del curso, y anoche hubo reunión de delegados. Lo bueno es que fue en una casa (calentita) en vez de el colegio (heladísimo).

Qué espanto... porque nunca falta el o la que hace preguntas tontas y además se extiende en el tema hasta que ya no tiene sentido lo que está diciendo, o se repite y repite y repite.

Lo otro, es que todos se ponen a comentar al mismo tiempo y al moderador, en este caso el rector le cuesta seguir con la reunión y hacer callar a todos (generalmente los papás y mamás se portan peor que los alumnos).

Entonces, una reunión que bien podría durar 1 hora, 1 hora y media duró 3 horas y media..... horror!!!!!

Y todo esto para decir cosas que después nos van a mandar por mail..... claro que está la parte motivacional del cuento, seguramente por eso hay que juntarse. Bueno, así es la life no más y hay que hacerlo por la Anto.

Como en casa

Posted on 4:58 In: , , , , ,

El otro día pensaba por qué la Antonia es acólito, por qué yo leo en misa, por qué hice el curso para ser servidora de la eucaristía (o ministro de comunión). Bueno, lo último porque siempre lo había querido.

Pero es porque aquí, en la misa de los niños en Santa María de Las Condes, nos acogieron los encargados de la misa, el padre Julio Dutil, en fin ... Dios nos llevó hasta ahí.

Empezamos a ir porque como parte de la catequesis de la Anto nos pidieron algún tipo de compromiso, y yo me comprometí a llevar a la Anto a misa. Después de probar ir a un par de misas para niños, nos quedamos con esta.
Vamos felices, a pesar de tener que levantarnos temprano el día domingo (la misa es a las 10 de la madrugada)... incluso al principio, como todavía hacía buen tiempo, nos íbamos caminando (40 minutos de caminata)... pero era un tiempo rico para compartir con la Antonia.

Ahora el solo hecho de ir a misa es compartir con ella, el que le guste ir, verla ahí en el presbiterio aprendiendo a ser acólito... equivocarse al tocar las campanitas, ver a la Berni que le enseña lo que tiene que hacer..... el que participemos las dos activamente en la misa, aunque no estemos juntas físicamente, es compartir.

Bueno, conclusión, siempre es bueno ir a misa, pero mejor si uno se siente en casa.