Qué mal volver de las vacaciones... definitivamente es un aterrizaje forzozo, sobre todo cuando tu jefe está a punto de vacaciones y está con toda la pega del mundo.

Además, está la avalancha de uniformes, cuadernos y útiles escolares en todos lados, entonces a la plata que gastamos en las vacaciones, hay que agregarle la plata de los mentados artículos para el colegio (menos mal que no tengo que pagar patente ni contribuciones... uff).

Y por supuesto, el resto de febrero es muerto en la oficina... casi no hay jefes, casi no hay pega.. podríamos trabajar medio día no más para poder irnos a la piscina o dormir siesta (claro, in your dreams).

En todo caso estuvieron buenísimas las vacaciones. Definitivamente la vista del lago Llanquihue con el Volcán Osorno, es una buena fuente de relax, sumado a la piscina, la piscina temperada con hidromasaje... maravillossso! y se agradece enormemente la posibilidad de haberlas tenido.
Ahora sólo queda soñar con las próximas (afortunadamente, guardo una semanita para el invierno)... y planear las del verano 2009.